Ahora que ya hace calor (que por cierto, ha costado un poco que llegara), que todos estamos con la mente más puesta en otro sitio que en el lugar correcto, podemos ver que ni tan siquiera en época vacacional la ética humana existe, es más, brilla por su ausencia. Pero esto es normal, en época vacacional se aprovechan para ejecutar proyectos y decisiones que tendrán menos repercusión por el mero hecho de que “no estamos”.
En estos días en verano, justo antes de que nos vayamos de vacaciones (restando los que por suerte ya lo están), veremos como si de un ejercicio de recuperación se tratase (por suspender durante el curso), se pondrán de golpe manos a la obra para la resolución de la ley del aborto, la cuestión catalana, el caso Nóos, etc.
Sobre el caso Nóos, me sorprende que no haya salido en más titulares porque ahora resulta demostrado que el actual Rey de España, conocía todos los movimientos de Urdangarín, por lo que, ¿no sería cómplice de corrupción?
En cuanto a la cuestión catalana, los continuos “tira y afloja” que se están marcando los gobiernos español y catalán respecto al referéndum hoy mismo ve otro capítulo con las balanzas fiscales. A una semana vista de la reunión de Rajoy con Mas, van echando leña al fuego no vaya a ser que nos quedemos sin verano y el frío nos abrace precipitadamente. Sumándole que el señor Duran i Lleida se ha ido “sin saber” por qué, se prevé lo de siempre: un no por respuesta al señor Mas.
Moviéndonos a un terreno “menos” político, los empresarios prefieren una salida pactada al proceso soberanista catalán. Todos ellos con más intereses económicos en el exterior que en el propio país, quieren que se llegue a negociar un acuerdo óptimo (pacto fiscal). Por cierto, seguro que dichos empresarios y también algún que otro político, están esperando las famosas “huelgas de vacaciones”, las que se aprovechan del verano, de todos nosotros que estamos esperando para viajar y despejarnos (tradicionalmente, las del sector de transporte). Me extraña que aún no haya habido ninguna.
Para finalizar, disfrutemos del verano porque luego vendrán demasiadas fechas, actos y movimientos que nos tendrán muy entretenidos.
(Artículo original de LaVanguardia.com)
